Terapia
A veces algo angustia, preocupa o hace sufrir y tras intentar superarlo, vuelve a aparecer. Este puede ser el momento para pedir la ayuda de un profesional.
En el caso de los niños y los adolescentes, son los adultos encargados de su educación los que suelen ver la necesidad de pedir ayuda psicológica.
En la consulta, presencial u online, atiendo a adultos, adolescentes y niños.
Adultos: Ansiedad, depresión, tristeza, estrés, angustia, miedos, fobias, pánico, pensamientos intrusivos, trastorno obsesivo compulsivo, somatizaciones, dudas, duelo, adicciones, dificultades en el trabajo, conflictos de pareja y familiares, problemas y disfunciones sexuales, trastornos de la personalidad, psicosis y esquizofrenia.
Adolescentes: Crisis personales, problemas de adicciones, dificultades con la identidad sexual, tristeza, apatía, trastornos de la conducta alimentaria, dificultades con los estudios, dificultades en la relación con los otros, comportamientos extraños, aislamiento, culpa y vergüenza, bullying.
Niños: Miedos, pesadillas, problemas en el colegio, problemas con la alimentación, dificultades en la familia, hiperactividad, déficit de atención, ira, rabia, mutismo, trastorno generalizado del desarrollo, autismo, enuresis y encopresis.